El otro día mi hermana Cristina me pedía algunos dulces para venderlos con el grupo joven.
Ella pertenece a la Hermandad de La Bella desde hace un año aproximadamente, y desde que adquirió su cargo consigue junto a sus niños todo lo que se proponen. Se unen la experiencia y buen hacer de Cristina y las ganas de trabajar de cada uno de sus niños (algunos no son tan niños, pero así es como yo ella los llama con todo su cariño)
En esta ocasión iban a vender dulces caseros en la apertura del Belén Navideño de La Casa de Hermandad y yo con toda mi voluntad intenté hacer algo que llamase la atención de niños y mayores. ¡Opinen! ¡Opinen!
Algunos niños y niñas…
A todas las galletas les coloqué un lazo para que pudiesen tener doble utilidad.
Aprovechando la sequedad de mi pobre bonsái (de lo que no me siento nada orgullosa), le saque unas fotos decorándolo con mis galletitas.
¿Qué os parecen?
¿Las colgaríais del árbol o ñam ñam ñam?
Me hubiese gustado poner alguna foto de este maravilloso "Grupo Joven de La Hermandad de Nuestra Señora De La Bella" pero por sus edades...
Queda oficialmente inaugurada la navidad por aquí.
¡¡Feliz Navidad!!
Guay!! nueva entrada y yo sin enterarme!
ResponderEliminarPues qué nos van a parecer? una maravilla de galletas!
A mí todo lo relacionado con la repostería me encanta, y si es por una buena causa aún mejor!
Respecto a colgarlas o no, te diré que hace un par de años decoramos nuestro árbol de navidad con galletas de corazones, y aguantamos sin comérnoslas eh?
Y el año pasado realicé para postre de nochevieja dos bandejas de muñecos de gengibre chico y chica... decoradas! buff este año ya no me he atrevido que lleva mucho tiempo.. ;-)
Seguro que a todos les encantó hincarles el diente a tus galletitas!
Feliz findeee
¡Qué bonitas galletas! Y tengo una casita blanca igual a las tuyas, jejeje, es una monada.
ResponderEliminarBesos,